Elegir las botas de montaña

Elegir botas de montaña

Para  elegir las botas de montaña debemos tener en cuenta: el tipo de trekking que solamos hacer por el monte la actividad que vayamos a realizar junto con el tipo de terreno por el que nos vamos a mover y la época del año en la que haremos esa actividad. Antes de irnos a una tienda de material de montaña tenemos que tener estas indicaciones bien claras.



A continuación mostramos unos consejos que te ayudarán a elegir el tipo de bota correcto que debemos utilizar para el senderismo que vamos a desarrollar y para el tipo de terreno por el que nos vamos a mover.

Calzado de montaña según el tipo de práctica o actividad

  • Si buscas un calzado para hacer paseos por el monte o practicar senderismo tendremos que buscar unas zapatillas o botas transpirables, con Botas de trekkingsuela antideslizante, de caña baja o media, ligeras de peso y poco rígidas. Podemos sacrificar la impermeabilidad por una rejilla transpirable que facilite la ventilación y evacuación del sudor. Las zapatillas de senderismo o hiking cumplen estos requisitos.
  • Si buscas unas botas para media o alta montaña tendremos que exigir una buena suela, buena transpirabilidad e impermeabilidad, de caña media e incluso alta, y que sean semi-rígidas, esto permitirá adaptarle unos crampones de correas por si queremos hacer algo más técnico. Las botas de trekking o para alta montaña serán suficientes.
  • Y si lo que deseas es hacer alta montaña invernal, tendremos que añadir más rigidez a las botas (rígidas o de plástico) y que soporten crampones semi-automáticos o, en el mejor de los casos, automáticos. Además, la capacidad de retención térmica será un factor imprescindible a tener en cuenta. Estas botas cuantan en su interior con un botín independiente de la carcasa plástica como aislante para temperaturas extremas. En este caso hablamos de las botas de alta montaña extrema, botas invernales, o botas para alpinismo.

Es necesario ser conscientes de que las botas “para todo” no existen, y por ello lo más recomendable es tener un par de calzados de montaña diferentes para cada condición (p.e. estival o invernal); o bien únicamente unas botas que se adapten al principal tipo de ruta que solamos practicar en montaña. No obstante, sí que existen unos aspectos comunes que tendremos que valorar a la hora de hacer nuestra elección, sea cual sea el uso que le vayamos a dar a nuestras botas. Estamos hablando de la suela y de la transpirabilidad.